El acordeón está diseñado básicamente en tres filas donde se puede tocar todo. La cuarta y la quinta facilitan la digitación de un acorde, por ejemplo, o de una nota difícil de alcanzar, sobre todo si eres como yo sin el pulgar (método antiguo). En resumen, no tanto la escuela como la práctica. Ejemplo de uso de la 4ª y 5ª fila: